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| Sin control sigue el incendio en Tomé. |
La situación más compleja la viven 18 familias del sector rural de Coroney, que debieron abandonar sus casas, debido a la amenaza del fuego, lo que significa que hay 72 adultos y 30 menores que debieron ser llevados a un albergue, mientras cientos de bomberos de toda la Provincia de Concepción y numerosas brigadas de CONAF combaten el fuego.
Las familias ya han perdido no sólo sus plantaciones de árboles que usan para leña, sino también sus árboles frutales y otros cultivos. También han debido sacar su ganado y otros animales domésticos, por riesgo de que mueran quemados.
El resto de la comunidad ha vivido una jornada de temor, debido a la proximidad del humo y el fuego, que amenaza con acercarse a sectores más densamente poblados, sumado a la baja presión del agua, que hace temer que en cualquier momento se produzca una interrupción del suministro de agua potable.
La recomendación que se hace es evitar salir de sus casas a niños pequeños y ancianos, además de personas asmáticas o con enfermedades crónicas, debido a los elevados niveles de contaminación del aire que tiene Tomé, debido al humo y las partículas en suspensión que se encuentran en el aire.
El tránsito hacia Concepción y Rafael se mantiene normal, aunque con precaución debido a la gran presencia de vehículos de emergencia que circulan por las vias.