|
Las autoridades visitaron hoy la Cuesta Caracoles de Tomé. |
Recorriendo los trabajos realizados en la Cuesta Caracoles de la comuna de Tomé, debido a los deslizamientos de tierra y la caída de árboles, que produjo el corte de ruta; el Intendente Rodrigo Díaz junto al director nacional de la Onemi, Ricardo Toro; y la directora regional, Gilda Grandón; anunciaron que se están implementando las medidas necesarias para dar una solución segura al problema.
El Intendente Díaz recordó que el tránsito no se ha interrumpido en ningún momento ya que se ha generado otra variante para que la comuna permanezca conectada y que hasta el lunes se extenderán los trabajos preventivos. “A los habitantes de Tomé, me gustaría transmitirle la tranquilidad que las medidas que se están tomando van a permitir reabrir en condiciones seguras la Cuesta Caracoles; por eso se ha tomado la decisión de cortar 33 nuevos árboles y con esto vamos a postergar un par de días la reapertura, pero sin perder conectividad”.
Rodrigo Díaz además destacó que en la Región del Biobío ha estado funcionando el Sistema de Protección Civil, “que tiene reuniones regulares, que obedece a una planificación para enfrentar el invierno y que está en todo minuto monitoreando todas las circunstancias que están existiendo”.
Respecto a las descargar al Río Biobío que han estado realizando las centrales Ralco y Pangue, se informó que estos son procedimientos absolutamente controlados. “El objetivo que tiene verter agua es evitar que se completen los embalses y que tengamos que abrir en una situación de emergencia”, contó el Intendente.
A lo anterior, el director nacional de la Onemi, Ricardo Toro, agregó: “Los ríos están dentro de su caudal y la Central Ralco está haciendo evacuaciones de agua en forma preventiva. Estamos en una situación de un sistema frontal que está controlado y todas las actividades que se hacen a nivel de Gobierno Regional, y donde Onemi es el coordinador del Sistema Nacional de Protección Civil, han funcionado adecuadamente”.
Toro cifró en 473 personas, las damnificadas en la Región del Biobío. “Hemos venido a constatar, con la presencia del señor Intendente y a petición del ministro del Interior, la entrega que se ha hecho de ayuda y otro tipo de elementos que han sido solicitado por las municipalidades que alcanza a alrededor de 30 toneladas tanto en la entrega como en la reposición de los stock críticos previstos para enfrentar nuevas emergencias”.
Finalmente, el Intendente Díaz afirmó que hay tres escuelas que se mantienen con suspensión de clases en el Biobío. Se trata de las ubicadas en Colcura, Escuadrón y Llico, donde los profesores no han podido acceder dado los cortes de caminos. “Esperamos que tan pronto reabramos los caminos y normalicemos la situación de esas escuelas, puedan volver las clases en su normalidad”, dijo Díaz.
Fuente: Intendencia.