
El último episodio que molestó a la comunidad fue la congestión generada por un bus interprovincial, que quedó "atrapado" en una de las cuestas, debido al escaso radio de giro que tienen las curvas de esa ruta, que impiden realizar una maniobra en forma fácil y se requiere experiencia por parte de los conductores profesionales para tomarlas.
La Municipalidad de Tomé está solicitando a las autoridades del Ministerio de Vivienda que estudien la factibilidad de una nueva alternativa, que permita facilitar y hacer más seguro el tránsito para la comunidad de 50 mil habitantes.