En forma completamente ilegal, un grupo de personas procedió a bloquear el camino público entre Tomé y las localidades de Dichato y Coliumo, atemorizados por los casos de COVID-19 que se han registrado en la comuna.
Se trata de vecinos de Dichato y Coliumo los que instalaron barreras improvisadas para controlar el acceso de vehículos y así intentar disuadir a las personas que iban de paseo a esas localidades.
La dirigente social de caleta Coliumo, Sara Garrido, explicó que “estamos haciendo control preventivo en la entrada, y estamos a la espera del protocolo para personas que están en sus segundas viviendas". “Tenemos bastante gente que se vino a instalar aquí antes, y que no es su residencia habitual; esto ha significado un aumento del consumo de agua potable", añadiendo que "se ha notado una baja de presión y el sábado estuvimos todo el día sin agua. Eso ocurre si hay un sobreconsumo, ya que tenemos un sistema de agua potable rural", agregó.
Además del control de acceso, se sumó el cierre voluntario de restaurantes, cabañas y otros servicios por parte de sus propietarios. Una situación similar ocurrió en Dichato, donde según explicó el dirigente Américo Lisperguer, una de las mayores preocupación era evitar la llegada de personas desde Ñuble.
Los dirigentes sociales dijeron estar conscientes de que no tienen atribuciones legales para controlar el acceso, sin embargo, argumentaron que “hemos podido hacer que se devuelvan unos 60 o 70 vehículos, entre los que venían a Dichato y los que pretendían pasar a Pingueral, lo que significa que la gente no ha entendido que se tiene que quedar en su casa”.
El alcalde de Tomé, Eduardo Aguilera, reiteró que no tienen atribuciones para este tipo de restricciones, pero expresó que “se dio un paso, porque según anunció el Presidente, los que fueron a sus segundas viviendas tienen un plazo determinado para volver (hasta las 22.00 horas de hoy), y creo que la medida del toque de queda es buena, aunque debería ser más extensa, pero podría irse desarrollando, porque esto está recién comenzando". "Estamos llamando por altavoces a la gente, para que se quede en sus casas, la cadena de abastecimiento está asegurada", añadió.