
El avistamiento de tortugas marinas es relativamente raro en el litoral de la Región del Biobío, debido principalmente a la presión sobre su hábitat que realiza el hombre, a través de la pesca indirecta (ya que se enredan en las redes) y otras actividades industriales.
A Chile llegan cinco especies de tortugas por temporada a alimentarse, desde otras regiones más cálidas, y todas se encuentran en peligro de desaparecer. Normalmente sólo aparecen hasta la Región de Valparaíso, por lo que es raro encontrar una en la bahía de Coliumo.