Por Ricardo Mahnke *
El lunes 15 de abril de 2013, un grupo de personas y
organizaciones culturales de Tomé, (entre los que pueden destacarse, Rolando
Saavedra, Tania Castillo, Darwin Rodríguez, Álvaro Pinochet, David Landaur,
Rodrigo Carrera, Claudio Ramírez, Andrea González, el suscrito, entre otras
personas, en un total aproximado a 20) fuimos convocados para ser informados
del actual estado de la nueva Casa de la Cultura.
Entre las presentes estaba el Seremi del Consejo de la
Cultura, Eduardo King, junto a varias autoridades comunales, encabezadas por el
Secretario Comunal de Planificación, Osvaldo Arenas, la encargada de Cultura
Valeria Gajardo, la abogada de la Municipalidad (cuyo nombre no retuve), a los
que se sumó el Administrador Municipal Luciano Parra; la alcaldesa no alcanzó a
llegar.
En la calle, afueras de la construcción, en un tono amable y
participativo, fuimos actualizados sobre la real situación de la Casa de la
Cultura, que paso a señalar:
La construcción, aún no entregada y terminada en un
95 %, ha sido suspendida, debido a que la Empresa RGV, encargada de la
construcción, no cumplió el contrato, pues no fue suficiente el monto de 850
millones de pesos iniciales con que fue adjudicada la obra.
Recordemos que estos
fondos de construcción y gestión de las nueva Casa de la Cultura, fueron
aprobados antes del terremoto de 2010.
No obstante, la escasez y
encarecimientos de los suministros para la construcción, la empresa continúo
adelante (“De manera un poco irresponsable”, como señalara King), suprimiendo
por completo el 4o. piso del proyecto original y abaratando muchos costos,
entre ellos, luces, amplificación y butacas, e inyectando nuevos recursos. Aún
así, la empresa no logró terminar por completo el edificio.
La actual administración municipal,
asumida en diciembre del 2012, se encontró con varios incumplimientos por parte
de la empresa. Aún así, decidió estudiar una propuesta para terminar la Casa de
la Cultura, de una vez por todas. Se trataba de hacer un esfuerzo y aportar los
últimos recursos, necesarios para completar la obra: unos 90 millones de pesos
más. Situación que la Dirección de Obras de la Municipalidad rechazó de plano.
Seguido de eso, la Municipalidad hizo efectivo y cobró los cheques en garantía
correspondientes en estos contratos. Debido a este hecho, la empresa demandó a
la Municipalidad y ésta contestó con una contrademanda, terminando
definitivamente esta semana la relación contractual con RGV.
De este modo, la tan anhelada Casa de
la Cultura, se transformó en un proceso judicial que ignoramos cuando
terminará. “6 meses más”, según el Secplac, “Hasta 3 años”, según Darwin
Rodríguez. Además, no podría prosperar ningún avenimiento entre las partes,
pues sería rechazado por Contraloría.
Según Osvaldo Arenas, el presupuesto
faltante para terminar la Casa de la Cultura, estaría aprobado; lo mismo que el
financiamiento para butacas, luces y amplificación. Así es que, bastaría con hacer
una nueva licitación para recomenzar los trabajos. Siempre y cuando el largo
juicio terminara de manera a favor del municipio. Así es que, hasta este
momento, los vecinos no podríamos hacer nada. Ni siquiera entrar al local.
No nos quedaría más que esperar que la
Municipalidad gane el juicio, se llame a licitación, se entreguen las obras y
podamos, por fin, inaugurar el soñado proyecto de una Casa de la Cultura para
Tomé. ¡No antes del 2014!
Lo otro,
sería presionar a la empresa para que se desista de su demanda. ¿Debió la
Dirección de obras aceptar el último acuerdo para terminar la construcción?.
¿Se adelantó la Municipalidad en cobrar
los cheques en garantía, cuando aún no se entregaba la obra?. Éstas y muchas otras preguntas quedan en el
aire.
Lo cierto es que la Casa de la
Cultura no saldrá pronto.
A
menos que tomemos cartas en el asunto. Nos organicemos y movilicemos para
defender nuestro patrimonio cultural.
*Escritor y cineasta. Publicado en Facebook. Foto: Andrea Pilar.