Carta de Felicitas Valenzuela publicada en Diario El Sur. Sábado 28 de junio de 2008.
SOBRE PINGUERAL
Señor director:
Me parece necesaro hacer una aclaración respecto al texto de la inserción que realizó don Gustavo Yánquez Mery el domingo 22 recién pasado, en la parte que menciona a mi difunto cónyuge, Adolfo Veloso Figueroa. Efectivamente, mi marido siempre y entusiastamente apoyó -en su cargo de intendente- los proyectos de inversión que significarán un crecimiento y desarrollo para la región, particularmente si ello importaba buenas oportunidades de más y mejores empleos para los habitantes de ella. Sin embargo, nadie podrá tener duda alguna que Adolfo, como hombre respetuoso del Derecho, jamás apoyó ni hubiera apoyado alguna iniciativa o proyecto que vulnerara la legislación vigente. Especialmente si se trataba de la infracción de normas que consideraba justas. Por ello, a toda la familia y a sus colaboradores les consta que Adolfo no aprobaba que el proyecto Pingueral no hubiere respetado el principio de que las playas son bienes nacionales de uso público, restringiendo el libre acceso a los habitantes que por años habían gozado de la belleza de aquel entorno. Lamentablemente, esta situación quedó nítidamente clara sólo al final de su período como intendente.De allí que él no alcanzara -en tanto máxima autoridad regional- a disponer lo necesario para volver el Derecho a su cauce. Por eso que no resulta totalmente apegada a la verdad la afirmación que se hace en aquella inserción que tiene justamente el propósito de defender esta actitud de impedir la libre circulación en un bien de uso público. Esperamos que finalmente este tema se resuelva conforme a Derecho y todos los habitantes puedan volver a disdrutar de las platas de Dichato y Pingueral, como siempre fue y debe ser.
FELICITAS VALENZUELA B.