jueves, enero 22, 2015

OPINION: ¿Qué puede esperar Tomé del término del binominal?

Nello Rolleri. Mg. Política y Gobierno. UdeC
Por Nello Rolleri.

Tomé tiene en la actualidad dos diputados que lo representan, como parte del distrito 45: Clemira Pacheco (PS) y Marcelo Chávez (PDC), que también incluye a las comunas de Penco, Coronel, Hualqui, Santa Juana y Florida.

Con la reforma electoral que se encuentra a punto de ser aprobada, este número subirá a ocho diputados y también aumentarán el tamaño del distrito, que será el número 20 y que incluirá a toda la Provincia de Concepción: Talcahuano, Hualpén, Concepción, San Pedro de la Paz, Chiguayante, Tomé, Penco, Florida, Hualqui, Coronel y Santa Juana.

En el Senado, se unirán dos circunscripciones y se elegirán en total cinco senadores por la Región del Biobío. Así se podrá hablar de "senadores regionales", en propiedad.

El término del sistema binominal viene a ser uno de los cambios políticos más importantes de los últimos años: se termina uno de los símbolos más persistentes de la dictadura militar, que durante 25 años favoreció a la segunda mayoría y que generó un empate artificial que significó poner límites a los cambios que el país había expresado en las urnas.

En la práctica, esta reforma permitirá una mayor representatividad electoral, en forma más proporcional al peso que tienen los votos de cada lista electoral. Es necesario considerar que la reforma mantiene el sistema de la "cifra repartidora" del Sistema D´Hondt, lo que mantiene una distribución proporcional, pero favorece a los candidatos de las listas más votadas.

Otro tema que será importante es el costo de la campañas, especialmente si se considera el reciente escándalo del "caso Penta". El temor es que distritos más grandes signifiquen también mayores costos en publicidad y transporte para los candidatos. No es lo mismo hacer campaña para cinco comunas, que para 12 comunas, donde hay un millón de habitantes.

La importancia de los medios de comunicación para acceder a este electorado más grande, la posibilidad de llegar con mensajes específicos a cada uno, son temas que preocupan a los posibles candidatos al Congreso. ¿Cómo se financiarán estas campañas? ¿Será posible que las empresas puedan seguir financiando la actividad política? ¿Correrán con ventaja los actuales parlamentarios, que ya poseen una base de conocimiento mayor sobre la población, en desmedro de los "nuevos" candidatos, especialmente de los independientes?.

Sin embargo, existe otro punto de vista de este tema, que es evaluar que los candidatos no necesariamente deberán intentar llegar a todos los electores de su distrito. Considerando que se eligen cinco diputados, es posible que "asegurándose" algunas comunas principales o algunos sectores específicos del electorado, tengan mayores opciones de un asiento.

Para una comuna como Tomé, con 50 mil habitantes, es difícil que surja un candidato que sólo pretenda ser electo con los votos que recoja en esta comuna; necesariamente deberá también salir a buscar los votos de comunas más grandes, como Concepción y Talcahuano.

Sin duda que el nuevo distrito 20 lo que vendrá a significar es una recuperación de la identidad del "Gran Concepción" como la segunda área metropolitana en importancia del país, que tiene las complejidades y la diversidad propia de las grandes urbes, pero que también incluye a sectores rurales que están menos desarrollados y con mayores carencias.

Otro de los temas pendientes será convencer a la ciudadanía que el aumento de 47 parlamentarios al Congreso significará un aumento de costos marginal para el funcionamiento del Poder Legislativo y que los beneficios de contar con una representación democrática más proporcional son mayores que estos costos.