sábado, mayo 17, 2025

Municipio gestiona instalación de centro de formación en la comuna

Turismo, servicios, comercio, productos del mar, agroindustria y energía emergen como sectores estratégicos de formación.


La Municipalidad de Tomé ha iniciado conversaciones avanzadas con una universidad regional para evaluar la instalación de un Centro de Formación Técnica (CFT) o un Instituto Profesional (IP) en la comuna. Esta iniciativa busca responder a una demanda concreta de los jóvenes tomecinos, quienes enfrentan limitadas oportunidades de formación superior en su lugar de origen. 

La propuesta se basa en un diagnóstico actualizado del mercado laboral local, donde destacan los sectores servicios, turismo y comercio, junto con proyecciones de crecimiento en energía, productos del mar y agroindustria.

Desde el municipio se ha enfatizado que esta alianza no solo permitirá mejorar el acceso a la educación técnico-profesional, sino también alinear la formación con las reales necesidades económicas y productivas de Tomé. La apuesta es por carreras de corta duración, alta empleabilidad y pertinencia territorial, que contribuyan a fortalecer la identidad productiva local y generar oportunidades sostenibles para los jóvenes.

El sector servicios, junto con el turismo y el comercio, son los principales motores económicos de la comuna. Sin embargo, presentan altos niveles de informalidad laboral, escasa capacitación formal y baja productividad. Una formación técnico-profesional enfocada en estos sectores permitirá formalizar y profesionalizar al comercio local, elevando su competitividad y calidad de servicio.

Paralelamente, se proyectan nuevas oportunidades en el ámbito energético, especialmente con iniciativas vinculadas a energías renovables, eficiencia energética y sostenibilidad, que se están desarrollando en el litoral regional. Estos proyectos requerirán técnicos capacitados en áreas como electricidad, mantención industrial y gestión de proyectos energéticos.

En el sector de los productos del mar y la agroindustria, tradicionalmente fuertes en Tomé y sus alrededores, también se observa un nicho de formación técnica que puede potenciarse. Carreras como técnico en procesos alimentarios, acuicultura, logística o gestión de calidad se presentan como opciones estratégicas para agregar valor a la producción local y fomentar el emprendimiento.

El rubro de la construcción también se muestra dinámico, con nuevos proyectos habitacionales y de infraestructura pública en marcha. Las autoridades locales consideran fundamental preparar mano de obra calificada en oficios como gasfitería, electricidad, obras civiles y prevención de riesgos, lo cual podría responder a la creciente demanda del sector.

Áreas como la salud y la educación también han sido incluidas en el análisis, particularmente en lo que respecta a la formación de técnicos en enfermería (TENS), asistentes de párvulos y técnicos en educación diferencial. Sin embargo, se subraya que la formación debe estar orientada a la empleabilidad real, evitando saturar sectores donde el empleo público ya muestra exceso de dotación, como es el caso del municipio y otras reparticiones estatales.

El estudio realizado por el municipio destaca que una gran parte del comercio en Tomé es informal, con baja cobertura de contratos, cotizaciones y capacitación. Profesionalizar este sector implica no solo mejorar la calidad de los empleos, sino también fortalecer la economía local.

Desde el punto de vista institucional, se busca que el nuevo centro de formación funcione en estrecha colaboración con el mundo productivo local, con programas de prácticas profesionales, inserción laboral y formación continua. Se espera también la participación activa de empresas, sindicatos y organizaciones sociales en la construcción de una oferta educativa pertinente.