El anhelado proyecto de una conexión ferroviaria directa entre Santiago y Concepción ha dado un significativo paso adelante. El Ministerio de Transportes y Telecomunicaciones (MTT) ha abierto la licitación para realizar un estudio de factibilidad que permita definir la mejor ruta para esta nueva vía férrea. Esta iniciativa busca mejorar la conectividad entre ambas regiones, impulsar el desarrollo económico y potenciar la actividad logística de la zona centro-sur del país.
El estudio, con un presupuesto de más de $1.260 millones, será ejecutado por el Programa de Vialidad y Transporte Urbano (Sectra) y tiene como objetivo principal proponer alternativas de trazado que optimicen los tiempos de viaje tanto para pasajeros como para carga. La falta de una conexión ferroviaria directa entre Santiago y Concepción, así como entre Chillán y Concepción, ha sido una histórica demanda de las regiones del Biobío y Ñuble.
La licitación estará abierta hasta el 23 de septiembre, y se espera adjudicar el estudio en diciembre de este año. Una vez finalizado el estudio, se contará con cuatro alternativas de trazado a nivel conceptual, de las cuales se seleccionará la más viable para desarrollar la ingeniería de detalle y posteriormente iniciar la construcción de la vía férrea.
Aunque el trazado aún no se ha definido, lo más probable es que sea similar al que actualmente tiene la Autopista del Itata, que atraviesa una zona rural de Tomé en el sector del peaje Agua Amarilla.
Las autoridades regionales han destacado la importancia de este proyecto para el desarrollo económico y social de sus territorios. El gobernador regional de Ñuble, Óscar Crisóstomo Llanos, señaló que esta iniciativa fortalecerá la capacidad logística de la región, facilitando el transporte de productos silvoagropecuarios hacia los puertos de la región del Biobío y acercando la carga al Aeropuerto Carriel Sur.
Por su parte, el seremi de Transportes y Telecomunicaciones del Biobío, Héctor Silva Gormáz, enfatizó que el estudio permitirá definir la mejor alternativa para conectar las dos principales ciudades del centro-sur del país y mejorar la utilización del Biotren. Además, se contempla la participación ciudadana en todas las etapas del proceso, garantizando así que el proyecto responda a las necesidades y expectativas de las comunidades.
Los beneficios del proyecto serán una mayor conectividad, con una reducción de los tiempos de viaje entre Santiago y Concepción, y entre Chillán y Concepción. Un mayor impulso económico para ambas regiones, con la potenciación de la actividad logística, facilitando el transporte de carga y pasajeros. Un estímulo al desarrollo regional, a través del fomento del turismo y mejora de la calidad de vida de los habitantes y una mayor sustentabilidad en el transporte regional, al producirse una reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero y menor congestión vehicular.